El fin de una era impresa y modelo de negocio: Enciclopedia Británica

El fin de las enciclopedias impresas

Después de 244 años de existencia, la edición impresa de la Enciclopedia Británica, uno de los mejores compendios de información y la más antigua en la lengua inglesa, será descontinuada para favorecer su edición online, indicó la empresa editora.

La última edición de la enciclopedia será la edición 2010, un conjunto de 32 volúmenes con más de 65.000 artículos, un peso de 129 libras (58,5 kilos), y un precio de USD $1.395, que incluye temas nuevos como el calentamiento global y el Proyecto Genoma Humano.

Jorge Cauz, presidente de Encyclopaedia Britannica Inc. Con sede en Chicago, USA, dijo en una entrevista "Es un rito de paso en esta nueva era". "Algunas personas se sienten tristes y nostálgicos al respecto. Pero tenemos una mejor herramienta ahora. El web site es actualizado continuamente, es mucho más amplio y cuenta con multimedia", informó el diario The New York Times.

Lo sucedido con la edición impresa de la Enciclopedia Británica es resultado de la era digital, y en especial de la aparición de competidores populares que brindan información sin costo alguno para el usuario como es el caso de Wikipedia, el cual en sus 11 años de existencia ha logrado reemplazar el conocimiento y autoridad de algunos expertos con la sabiduría de las masas. A ello se agrega el sin número de fuentes digitales, online y offline, que se vienen desarrollando colectivamente bajo el concepto crowdsourcing, de libre autoría, y con un costo revestido de publicidad o bajo el esquema freemium.

En los últimos años los libros impresos de referencia han sido eliminados casi por completo debido al auge de Internet y su gran variedad de recursos. Contenido especializado en la actualidad es escrito y editado por miles de personas quienes contribuyen activamente y con gran precisión en la discusión de temas. Algunos de dichos contribuyentes son académicos y estudiosos quienes aportan sus conocimientos en forma desinteresada o por un algún beneficio que va desde el reconocimiento hasta lo económico.

¿Pero qué tan certera es la información en estas enciclopedias colectivas gratuitas?

En el preciso caso de Wikipedia, debemos mencionar que no toda la información presentada es 100% verídica y libre de manipulación. En varios casos, Internet marketers y/o promotores de productos, servicios y websites, usan sus contenidos para insertar publicidad discreta en forma de fuente de información, referencia o datos genéricos sobre un tema en cuestión.

En otros casos, la manipulación va a un grado mayor citando hechos no confirmado, fuentes inexactas y hasta inventando información que no puede ser fácilmente corroborada por los editores debido al volumen de información manejada y lo limitado de los recursos con que cuentan.

A diferencia del concepto de librería abierta en Internet y en contraposición al aporte y conocimiento ilimitado de las masas, la edición 2010 de la Enciclopedia Británica cuenta con 4.000 contribuidores incluyendo a personajes como Arnold Palmer, jugador profesional de golf quien escribiera el contenido sobre el torneo de Masters; Jack J. Lissauer, un científico espacial del Centro de Investigación Ames de la NASA, quien escribiera sobre los planetas extra solares; y Tony Hawk, considerado como la figura más renombrada en el mundo del skateboarding.

Las ventas de Enciclopedias Británica alcanzaron su punto máximo en 1990, cuando se vendieron 120.000 unidades en Estados Unidos. En 2010, solo se vendieron 8.000 unidades con un saldo de 4.000 unidades que han sido almacenadas en un depósito hasta el término de su venta. En adición a la ardua competencia experimentada por las versiones digitales, el precio de un set de Enciclopedia Británica no facilita su acceso a la mayoría de familias. El New York Times indica que sus compradores están conformados típicamente por "embajadas y consumidores bien educados y de alto nivel económico", quienes tradicionalmente otorgarían el merecido valor escolástico a dicho contenido. Incluso, si recordamos un poco, no es tan lejano el día en que el comprar una colección de enciclopedias se constituía en toda una experiencia familiar en el que intervenía un proceso de negociación de pagos de cuotas y un plan financiero que se prolongaba por meses o hasta años.

Le tendencia inexorable a la digitalización de contenidos, sea este en formato de texto, audio, imagen, video o multimedia, está forzando a las empresas a buscar nuevas formas de negocios y adaptación a la economía digital. Por lo pronto, una de las más grandes y antiguas ediciones impresas acaba de morir, ¿Cuál será la siguiente?