Ventajas de los seguros de vida permanentes

Quienes busquen un seguro de vida permanente, pueden escoger entre los de tipo variable, universal o universal-variable.

Seguro de vida permanente
Seguro de vida permanente - Tipos de seguro permanente

Las ventajas de un seguro de vida permanente se pueden condensar en dos características fundamentales, la primera de ellas es el poseer un valor de la prima y cobertura de tiempo indefinido, y la segunda contar con la función de ahorro que se asocia al cobro extra que el titular paga, producto del precio promedio de la prima que calcula la compañía aseguradora.

El ahorro del que se disponga dependerá del tipo de seguro permanente, la compañía que se haya elegido y las condiciones de la póliza. La porción que se le permite a los seguros cobrar de más, en el comienzo del contrato (por ley), corresponde al promedio que hacen las aseguradoras sobre el monto de la prima -considerando los altos valores para las personas de edad avanzada-. El valor extra es utilizado a favor del titular del seguro para ser entregado a éste como préstamo en caso de que así lo requiera. Si el dueño de una póliza nunca hace uso de este dinero, éste servirá para subsidiar en parte el aumento de costo de la póliza de seguro al envejecer.

A pesar de ser un beneficio para quienes optan por los seguros permanentes, el contar con un monto de ahorro no admite ser dejado al beneficiario en caso de que nunca se llegue a utilizar, ya que éste tiene acceso a la cobertura predispuesta en la póliza y nada más.

Tipos de seguro de vida permanentes

Seguro de vida permanente tradicional

Este seguro es el común y corriente que cualquier persona puede obtener, aquí el titular de la póliza es quien fija la cobertura del seguro y acuerda el pago de una prima, la que también es posible pactar en cuotas -dependiendo de la aseguradora-.
Los ahorros que se vayan generando conforme la administración que le de la aseguradora, no se pagarán nunca a los beneficiarios, aunque si el titular de la misma decide cambiar de seguro o suspenderlo, dicha cantidad se puede recuperar -descontando los pagos por servicios y por dar de baja la póliza-.

Seguro de vida variable

Es una forma flexible de ver la inversión del usuario en un seguro de vida. La aseguradora invierte el extra cobrado en renta variable, el cual forma parte de una estrategia de largo plazo para entregarle beneficios al titular.

En este tipo de seguros, el monto de la póliza es definido por el resultado de las inversiones que se han realizado, partiendo de un mínimo. En caso de que los beneficios que generen las inversiones realizadas sean mayores que el monto mínimo señalado por la aseguradora, los beneficiarios podrán recibir lo ganado, pero si es menos, obtendrán el mínimo garantizado.

Seguro de vida universal

Dependiendo de las opciones que presente la aseguradora, la porción sobrante del cobro de un seguro será puesto a intereses o invertido de otra forma. Todos los que escogen esta opción, pueden abonar el dinero ahorrado al pago de las primas que queden (para amortizarla), caso en el cual la aseguradora reducirá el monto de las primas (por el abono del ahorro utilizado), y con el dinero de la inversión pagará la diferencia restante.

La ventaja de este sistema se encuentra en el respaldo para quienes de un momento a otro no puedan responder con el pago normal de la prima del seguro, sin embargo, también implica un riesgo al momento en que se acabe el dinero acumulado por concepto de “inversión”, y luego no se pueda seguir pagando la póliza, situación en la que se verá cancelada por no pago.

Todo aquel que desee suspender los pagos de sus primas, y posea este tipo de seguro, deberá consultar con su agente o compañía aseguradora sobre cuanto tiempo puede dejar de pagar de acuerdo a lo que tiene acumulado, para así no correr el peligro de que ésta se venza.

Seguro de vida universal-variable

Este tipo de pólizas combinan los sistemas de las de tipo variable y universal, por lo que se permite la inversión en el mercado bursátil, generando así altos ingresos en el largo plazo para los beneficiarios, y la capacidad de ajustar el monto de las primas -de ser necesario- gracias al aporte de su cuenta de inversión.