La importancia de leer, libros electrónicos incentivan el hábito

El habito de la lectura se ve incentivado, nuevamente, por la llegada de los lectores digitales, aquellos que ahorran espacio y peso en una simple memoria SD o disco interno.

Sony eReader
Sony eReader

Mientras que la llegada del computador hizo perder la costumbre de leer hasta los periódicos, para verlos vía Internet, la salida al comercio en cantidades impensadas de lectores electrónicos incentiva a que más personas retomen el hábito, pero sin tocar una hoja de papel.

Marketing and Research Resources Inc., mostró en un estudio que el 40% de las 1.200 personas encuestadas – poseedoras de un lector electrónico – están completamente encantadas de volver a leer en este formato versus la experiencia en libros tradicionales. El 58% del mismo universo señaló que su hábito de lectura no variaba en absolutamente nada, tanto en medios tradicionales como electrónicos, y sólo el 2% dijo que leía menos que antes. Una de las respuestas más interesantes fue la de señalar que con esta tecnología se leerán más libros en el futuro.

Estados Unidos es pionero en una gran cantidad de cosas, los lectores electrónico o eReaders son una de ellas, por eso el cambio entre la publicación de libros tradicionales y electrónicos dio un vuelco insospechado para todos. Forester Research dijo de antemano que para el mes de Septiembre al menos deberá haber 11 millones de estadounidenses con un dispositivo de lectura electrónica. Otra de las muestras del creciente mercado son las alzas sorpresivas del mercado, donde las ventas de libros electrónicos aumento en un 183% sólo para el primer semestre del año en curso.

Amazon, quien es por ahora el mayor vendedor de libros electrónicos en Estados Unidos, dijo que sus usuarios a la fecha compran 3,3 veces más libros que antes luego de adquirir Kindle, su propio lector de eBooks.

¿Qué es lo que causa tanta sensación en la audiencia? Muy probablemente el impacto fuerte en la sociedad está incentivado por el no tener que ocupar mucho espacio físico ni peso para disponer de una gran cantidad de información teórica, perfecto para estudiantes y profesionales que siempre quieren perfeccionarse o para aquellas personas que constantemente buscan estar al día de todo lo que ocurre. Un lector digital, dependiendo de sus características técnicas, utiliza memorias SD u de otro tipo, lo que se traduce en la posibilidad de llevar consigo una cantidad ingente de información sin trasladar cientos de libros, pudiendo leer con prescindencia de luz natural y sin correr riesgos de deterioro de las hojas de un libro convencional.

La locura de los eBooks

Un escritor consumado como lo es Michael Connelly, señala que tanto en la Kindle, iPad y Sony Reader maneja una variedad de 30 libros aproximadamente, pues en la editorial le regalan muchos libros en este formato y se ahorra un peso inmenso al momento de viajar, cosa que hace habitualmente y hoy sin renunciar a llevar consigo la información.

Desde el punto de vista científico, Jakob Nielsen, investigador preocupado de la forma en que interactúa la tecnología y las personas, hizo una interesante prueba de lectura sobre las historias de Ernest Hemingway, solicitando la ayuda de 32 personas y dándole los textos en formato de libro convencional, en iPad y Kindle. Los resultados no dejan de sorprender, considerando que los lectores de Kindle demoraron un 10,7% más que aquellos que lo hicieron en un libro convencional, mismo caso que los que utilizaron un iPad, con un retraso de 6,2%. La conclusión es evidente, aún no se dispone de tecnología como para entregar la misma nitidez que tiene un papel impreso.

Se estrecha la lectura entre hombres y mujeres

El estudio realizado por Book Industry Study Group, señaló que los hábitos de lectura gracias a los lectores digitales cambio positivamente, acortando así la brecha entre hombres y mujeres a la hora de tomar un libro y leerlo. En las estadísticas, las mujeres leían más libros que los hombres desde siempre, pero ahora ellos son los que lideran la lista con un 52%, versus el 48% de mujeres que lo acostumbra.

Otra estadística señala que el 52% de las veces se pagó por un libro electrónico (o más de uno), mientras que el 48% de las oportunidades se descargó de forma gratuita. Estados Unidos no podía quedar atrás, por ello ya existe la iniciativa de las grandes bibliotecas en el país para prestar libros electrónicos vía Internet. En la actualidad el 66% de las bibliotecas estadounidenses lo hacen, cifra positiva si se considera como referente al 2005 en que sólo lo hacía un 38%.