Paneles solares, generadores amigables
Producir energía limpia y sostenible es más necesario cada día. Existe una alternativa ecológica y económica para lograrlo
Producir energía limpia y sostenible es más necesario cada día. Existe una alternativa ecológica y económica para lograrlo
La fuente de energía natural más poderosa que conoce la humanidad, es el Sol, que por sí solo puede generar 4.000 veces más energía que la que una persona requiere en un año. Y esta exorbitante cantidad puede aprovecharse de manera directa, o intervenida, para ser convertida en otras formas prácticas y dosificadas de energía, empleando diversos recursos como los paneles solares.
¿En qué consisten?
Los paneles solares en realidad son dispositivos sencillos, diseñados para aprovechar la energía emanada de la radiación solar, que cuentan con dos mecanismos fundamentales: los colectores solares y los paneles fotovoltaicos, que generan energía eléctrica.
Paneles de energía solar térmica
Pueden ser empleados para colectar agua o aire. Para elevar la temperatura del agua, se emplean tubos provistos de unas especie de aletas. Éstas reciben la radiación solar y la trasmiten al agua que circula por los tubos. Si todo este mecanismo se introduce en una caja de vidrio aislante, se multiplica el rendimiento debido al efecto invernadero. El resultado es utilizado para aparatos de calefacción o como agua caliente con fines sanitarios.
Los colectores de aire, hacen circular a éste manteniéndolo en contacto con los absorbentes, para ser luego ventilados en calefacción o para acelerar el secado en la industria agrícola.
Paneles solares fotovoltaicos
Están compuestos de celdas que transforman la luz solar en electricidad, por lo que son conocidas también como celdas fotovoltaicas (del término griego “fotos”, luz). La energía luminosa genera cargas positivas y negativas en semiconductores, que producen un campo eléctrico, y éste a su vez genera corriente.
Otros usos aparte de energía eléctrica terrestre o fija, se enfilan hacia los medios de trasporte, en la actualidad algunos vehículos eléctricos y los barcos solares, funcionan con este tipo de energía.
Tanto en los paneles térmicos como en los fotovoltaicos, se emplea un modelo plano, con una superficie ancha y larga, que facilita su instalación, y puede ser empleado igual para industrias o para hogares.
Algunas de las ventajas de emplear energía fotovoltaica
- De fabricación sencilla, la tecnología empleada favorece la instalación en lugares apartados, a los cuales no llegan las redes convencionales de servicios. El mejor ejemplo, es su empleo en naves espaciales
- Los paneles pueden adaptarse no solo a cualquier lugar sino a diversos usos, por ser modulares y ajustables en su capacidad generadora
- Los costos para su instalación son sumamente económicos y no es necesario un transporte especial ni el empleo de combustibles
- No requieren un mantenimiento costoso o complicado
- El producto final es energía limpia, no contamina ni ambiental ni sónicamente y no genera residuos
Desventajas e inconvenientes
Como en cualquier otra área, la tecnología solar presenta también algunos inconvenientes, aunque los defensores sostienen que los beneficios son mayores. Por ejemplo, para generar energía fotovoltaica es imprescindible el silicio, como materia conductora.
El aumento en la producción de esta energía, amenaza con agotar las reservas del mineral, lo que ocasionaría grandes dificultades a la industria microelectrónica. De continuar esta tendencia, se verían igualmente afectadas muchas otras áreas de la industria.
También está el hecho de que para producir niveles de energía útiles y razonables, se requiere el empleo de grandes cantidades de paneles y las correspondientes áreas donde ubicarlos.
El sistema es viable solamente en aquellas regiones que gozan de luz solar estable y suficiente.