Nuevas fuentes de empleo en América Latina
Según la Organización Mundial del Trabajo, OIT, la tasa de desempleo en la región seguirá bajando este año, con un nuevo reto en concreto: la calidad del trabajo
Según la Organización Mundial del Trabajo, OIT, la tasa de desempleo en la región seguirá bajando este año, con un nuevo reto en concreto: la calidad del trabajo
El informe “Panorama Laboral para América Latina y el Caribe” emitido por la OIT, destaca que la región resistió los embates de la crisis sobre el empleo, con un resultado alentador, sin embargo, es necesario abordar desafíos nuevos relacionados con la calidad de los puestos de trabajo. La información fue divulgada desde la sede regional del organismo en Lima, por su director, Jean Maninat.
En detalles, el documento señala que la tasa de desempleo urbano regional podría bajar hasta el 7,2% en el transcurso del presente año, de continuar las proyecciones sobre el crecimiento económico. “En el 2010 este crecimiento generó empleo para 1,2 millones de personas, pero faltan unos 16,9 millones de latinoamericanos que aun no consiguen trabajo”, agregó Maninat, destacando que una de las lecciones de la crisis de estos últimos años, es que es posible aplicar políticas inspiradas en la promoción y consecución del trabajo decente.
Un nuevo desafío: consolidación de logros
Otro punto que precisó el Director de la OIT, es la importancia de promover tanto la cohesión social, como la consolidación de los logros alcanzados hasta el presente en materia de crecimiento, puesto que las economías pueden mejorar, pero mientras la gente no consiga trabajo, no se puede hablar de recuperación real ni sostenible. Los mecanismos de protección social que a su vez protegen los ingresos (reajustes salariales, salario mínimo), o los de programas sociales, son medidas acertadas para alcanzar estos fines.
Durante la presentación del informe, se plantearon también algunos desafíos de suma relevancia, tal es el caso del desempleo en los sectores juveniles, asunto que causa gran desaliento en esta población. En ese sentido, los esfuerzos deben orientarse a brindar más oportunidades, al igual que en lo referente a la igualdad de género. Algunas propuestas abarcarían una más amplia cobertura de la protección social, abrir espacios para el diálogo y facilitar vías que conduzcan a disminuir la informalidad como única fuente de ingresos.
Desempleo juvenil y empleo informal entre las tareas pendientes
En siete países la tasa de desempleo juvenil urbano bajó de 17,3% a 16,1%, sin embargo la situación dista mucho de estar en vías de solucionarse, pues estas cifras representan más del doble que el desempleo, en general, y más del triple del desempleo de adultos. Unos 7,6 millones de jóvenes no tienen ninguna ocupación de manera de generar ingresos, lo que equivale a 45% del total de la población regional.
En cinco países el empleo formal creció en 3,1% en el segundo trimestre del año pasado, pero fue ampliamente superado por el 7,2% de aumento en el sector informal. En síntesis, los datos indican que en el 2010 el empleo informal afectaba al 53,8% de los trabajadores. Habría que esperar el primer informe trimestral de 2011, para verificar si esta tendencia se mantiene, aumenta o disminuye.
Recuperación debe traducirse en más empleos
Por último, se señala que en situaciones de crisis, es común que se produzcan aumentos en las cifras de informalidad laboral, pues muchas personas se ven obligadas a desempeñar cualquier actividad que les genere ingresos, aun cuando no cuenten con ninguna protección social, lo importante es que los gobiernos de la región implemente políticas que estimulen la inversión y por ende, la reactivación de los sectores productivos que son la principal fuente de empleos dignos para los latinoamericanos.