China – Estados Unidos: el recuento de los daños
El modo en que Estados Unidos afronta el conflicto con China pone en riesgo no solo la economía de ambos países, sino también su relación diplomática.
El modo en que Estados Unidos afronta el conflicto con China pone en riesgo no solo la economía de ambos países, sino también su relación diplomática.
Al poco tiempo de iniciar la guerra comercial con China aumentando los aranceles, Estados Unidos limitó la capacidad de Huawei de comerciar con empresas de este país en un acto que supone una escalada significativa en la lucha de poder entre Estados Unidos y China.
Con el transcurrir de los días, la perspectiva de llegar a un acuerdo se ve cada vez más distante.
Si bien en un principio Estados Unidos ha justificado sus acciones contra Huawei, apelando a un tema de seguridad nacional, las posteriores declaraciones del presidente Donald Trump acerca de que Huawei podría ser parte de un futuro acuerdo comercial entre las dos economías más grandes del mundo, dejan entrever que las medidas contra la empresa china son motivadas por asuntos que van más allá de los riesgos de seguridad.
Algunos analistas ven en las acciones de Trump un intento de controlar a esta poderosa empresa y, por consecuencia, a la creciente importancia de China en el mundo.
¿Cuán perjudiciales son las medidas contra Huawei?
Estados Unidos incorporó a Huawei a una lista de empresas con las cuales las compañías estadounidenses no pueden comerciar a menos de que tengan una licencia. Casi al mismo tiempo, Trump firmó una orden ejecutiva que prohibía a las empresas estadounidenses utilizar aparatos de telecomunicaciones pertenecientes a compañías sospechosas de representar un riesgo para la seguridad nacional.
Todo ello ocurre en un contexto en el que Huawei se constituye como el segundo mayor fabricante de teléfonos inteligentes del mundo teniendo un papel preponderante en el desarrollo de la tecnología de próxima generación 5G.
El responsable jurídico de la empresa, Song Liuping, ya advirtió que más de 3.000 millones de usuarios en todo el mundo podrían verse afectados por la decisión de Estados Unidos de incluir a Huawei en la lista negra.
Hasta el momento, Google ya le impidió a Huawei hacer algunas actualizaciones a su sistema operativo Android, al tiempo que los nuevos diseños de celulares de la empresa china no tendrán acceso a algunas aplicaciones de la tienda Google Play.
La profesora asociada de economía de la Universidad Willamette de Estados Unidos, Yang Liang, se ha pronunciado al respecto:
Si los teléfonos Huawei se ven afectados por la falta del sistema operativo Android, esto perjudicará a los consumidores al limitar la competencia en el mercado de celulares y causará un aumento de precios.
Muchos analistas han manifestado que las restricciones contra Huawei pueden significar un considerable retroceso en el desarrollo del 5G.
En ese sentido, Liang añade:
Huawei también tiene una decena de patentes en el desarrollo de 5G. Limitar a Huawei hará retroceder a la tecnología 5G y hará que sea más costoso implementarla.
¿Cómo se perjudican las empresas estadounidenses?
Pero no solo China será la única afectada, muchas firmas estadounidenses también sentirán los efectos negativos de esta guerra comercial, sobre todo aquellas que eran proveedoras de Huawei, pues el fundador de la empresa, Ren Zhengfei ha expresado recientemente que la compañía usaría más sus propios chips si Estados Unidos le impone más restricciones y que reduciría considerablemente sus compras al país norteamericano.
Se sabe que la mitad de los chips que usa Huawei son de firmas estadounidenses y la otra mitad son producidas por ellos mismos. Por ello, varios expertos señalan que el gobierno de Estados Unidos estaría arriesgándose a provocarse un daño a sí mismo.