El fin de Berlusconi

Luego de hacer uso de su inmenso poder político y económico a lo largo de 18 años como Primer Ministro, el segundo hombre más rico de Italia con una fortuna de US$7.800 millones, tiró la toalla y anunció que dejará su cargo después de haber sufrido una humillante derrota en una votación parlamentaria en la que perdió la mayoría de los partidarios que lo apoyaban.

Lo cierto es que ante la profunda crisis que vive Italia, que es la tercera economía de la Unión Europea, acrecentada con una crisis política que crece como una bola de nieve, minaron el capital político de Berlusconi. Su propuesta es la de convocar a elecciones, pero esto dependerá de los acuerdos a los que llegue el presidente Giorgio Napolitano con los diversos partidos políticos.

Y para calmar aún más este clima tenso que vive Italia, Berlusconi anunció también que no volverá a presentarse en la eventualidad de que existan elecciones. "No volveré a presentarme y además me siento liberado", indicó a la prensa de su país agregando que su sucesor político sería Angelino Alfano, hombre de confianza que heredo las riendas del partido de centro derecho Pueblo de la Libertad (PDL).

Sin duda que el mandatario recibió un duro golpe bajo luego de la aprobación por la Cámara de Diputados de las Cuentas del Estado del 2010, pero sin mayoría alcanzas la mayoría absoluta. Y antes de quedar noqueado en la lona, dijo que renunciará cuando el Parlamento incorpore los recortes prometidos a la Unión Europea y así evitar que la crisis de la deuda en el bloque europeo complique aún más a Italia.

Por lo pronto, los medios italianos ya especulan quién podría ser el posible sucesor de Berlusconi y coinciden que no debería estar ligada a un partido y ser una persona reconocida a nivel internacional. Por ahora, el favorito es el rector de la Universidad Bocconi de Milán. Mario Monti, de 68 años, seguido de Umberto Bossi, de 70, presidente del partido de la Liga Norte y Pier Ferdinando Casini, de 55 años, presidente del partido de centro UCD.