Papa Francisco abre una puerta para que los sacerdotes se puedan casar
“Al no ser un dogma de fe, siempre está la puerta abierta…”
“Al no ser un dogma de fe, siempre está la puerta abierta…”
El Papa Francisco vuelve a formar un revuelo de un tema largamente discutido y debatido, nos referimos a la posibilidad que los curas se puedan casar.
Esta semana el Papa visitó Israel como un éxito, pero la noticia más resaltante sucedió en el vuelo de retorno a casa (de Tel Aviv a Roma). El Papa Franciso viajaba en un vuelo comercial de la aerolínea israelí El Al cuando surgió el tema del celibato y del posible matrimonio de los sacerdotes por parte de los periodistas que acompañaban a Jorge Mario Bergoglio, quien respondió con palabras positivas a esta posibilidad y dijo literalmente :
"La Iglesia católica tiene curas casados. Católicos griegos, católicos coptos, hay en el rito oriental. Porque no se debate sobre un dogma, sino sobre una regla de vida que yo aprecio mucho y que es un don para la Iglesia. Al no ser un dogma de fe, siempre está la puerta abierta".
Recordemos que una situación similar se dio en el vuelo de Rio de Janeiro a Roma, en su última visita del Papa a Brasil, en donde tocó el tema de los homsexuales.
Este tema saltó al debate periodístico cuando hace algunos días el Papa Francisco recibió una carta de nada menos de 26 mujeres enamoradas de sacerdotes, en donde se le pedía unánimemente que dejara de prohibir un vínculo tan fuerte y hermoso.
El tema de la posibilidad de que los curas se puedan casar es de larga data, pero siempre fue un tema completamente cerrado por la Iglesia Católica que defendía a ultranza el celibato sacerdotal. Hoy Papa más “liberal” con una panorama más real de nuestro mundo abre una posibilidad a una discusión de un tema muy importante y que siempre se tenía relegado con leyes extremadamente ortodoxas.
Se sabe que existe un sector de la Iglesia Católica que está a favor de que los curas se puedan casar, formar una familia y tener hijos; sector que siempre ha guardado sus deseos en un silencio digno de la iglesia. Además se sabe de miles de casos de sacerdotes que abandonaron los hábitos y el celibato para formar una familia. No cabe duda que es un tema muy polémico, pero empezar a tratarlo y por el mismo Papa ya es un comienzo.