Inminente rescate de los mineros atrapados en Chile

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La máquina T-130 está actualmente a 40 metros de los mineros atrapados en el norte de Chile, lo que hace suponer el rescate de éstos se llevará a cabo el martes próximo 12 de octubre, según lo aseveró el Ministro de Salud, Jaime Mañalich. Los 33 mineros atrapados a 700 metros bajo tierra en Copiapó, norte de Chile, están realizando tareas específicas bajo la guía de un médico especializado en medicina deportiva, Jean Christophe Romagnoli.

Ya se han logrado perforar 585 metros gracias al plan B que se realiza con la máquina T-130, y sólo se detuvo por un tema de mantenimiento para cambiar el taladro y no sufrir desperfectos en los últimos 40 metros que restan para rescatar a los mineros que desde el 5 de agosto se encuentran atrapados en la mina. Una vez que se logre perforar hasta llegar al taller donde se encuentran los mineros, se estudiará si hay o no que reforzar las paredes de la perforación (para evitar derrumbes), maniobra que se llevaría a cabo a través de un encamisado especial que tardaría una semana. Este estudio se llevará a cabo por medio de una cámara de sondaje que revisará concienzudamente las paredes del ducto para no sufrir percances durante el rescate.

La tarea de rescate se estima que durará cerca de 48 horas, donde luego de ser sacados a la superficie todos los mineros, pasarán a ser examinados en el hospital de campaña que se ha armado en el lugar para pasar los primeros controles de salud.

Trabajo físico especializado para los mineros previo al rescate

El médico Jean Christophe Rommagnoli está a cargo de la preparación física de los mineros antes de la salida a la superficie el próximo martes en una cápsula que ha sido diseñada por ASMAR (Astilleros y Maestranza de la Armada de Chile). La idea de acondicionar los músculos de los mineros, aseguró el médico especialista, es evitar que sufran calambres o espasmos durante el rescate, pues dentro de la cápsula no podrán variar su posición por 20 o 30 minutos aproximadamente.

Parte de los ejercicios que actualmente desarrollan los mineros incluyen trabajo cardiovascular, fortalecimiento de las piernas, movimientos para mejorar el flujo de sangre en el cuerpo, entre otros. Para controlar la condición de los mineros atrapados, éstos utilizan una banda en el pecho que transmite los signos vitales en todo momento, pues a 700 metros bajo tierra hay muchísima humedad y una temperatura que bordea los 26º Celsius.

El 15 de septiembre se comenzó a practicar actividad física con miras a lo que sería el rescate que ya es inminente, en ese entonces el ejercicio consistía en caminar a una velocidad de 4,8 kilómetros por hora por 30 minutos, sin embargo, al llegar el final de la espera se implementaron ejercicios de contracción que contribuyen a una mejor irrigación sanguínea en el torso y el cerebro.