Ahorrar en seguros, seis errores que se deben evitar

Las crisis económicas son peligrosas porque obligan a las personas a hacer recortes de gastos, entre los cuales siempre se termina por dejar seguros o bajar el pago de los mismos, circunstancia que podría terminar por sub-asegurar a las personas y eso es lo último que debe permitirse en momentos de inestabilidad laboral.

Revisar si se dispone del seguro adecuado en tiempos de crisis económica es fundamental para personas y familias, pues haciendo pocos cambios la protección de los seguros puede convertirse en un verdadero desastre.

Dentro de los seis grandes errores que no deben cometerse mientras se atraviesa por una crisis se encuentran:

1. Asegurar la casa
   No hay que asegurar una casa por el valor que esta tenga como bien raíz, sino que por lo que cueste su reconstrucción, pues con la crisis económica el precio de los bienes raíces ha caído mucho, por ello el error más grande es reducir el monto de la cobertura.

   Una buena forma de ahorrar dinero en este caso está en aumentar el deducible, donde $500 están bien, aunque también se puede llegar a $1,000 y se ahorra un 25%.

2. Selección de la aseguradora
   La compañía de seguros que se escoja debe tener una buena reputación, no simplemente ser la que ofrece el seguro por un menor precio. Es preciso hacerse asesorar en este punto y revisar las estadísticas que se publican regularmente.

   Una manera de ahorrar en este punto es escoger una compañía que esté siempre dispuesta a contestar las interrogantes que se tengan, así como también actuar de forma justa en caso de que se tenga una reclamación.

3. Cobrar pólizas de tipo permanente (Whole-Life)
   Uno de los errores más comunes que comenten quienes se ven enfrentados a la crisis económica es tratar de cobrar el valor de rescate de las pólizas de seguro permanentes (cash value), sin embargo, el problema de hacer esto es que cuando se intente optar por un nuevo seguro se tendrá que enfrentar a un costo más elevado.

   La forma de ahorrar en este sentido está en consultar qué se debe hacer para tener un crédito por el mismo monto del valor de rescate de la póliza en cuestión sin tener que dejarla.

4. Dejar sin efecto los seguros contra inundaciones
   Un seguro contra inundación es visto como algo “innecesario” cuando la crisis económica golpea la puerta de una familia, sin embargo, las estadísticas demuestran que el 90% de los desastres naturales que tienen lugar en Estados Unidos contemplan una inundación, por ello hay que volver a preguntarse ¿Es realmente necesario dejar este seguro?

   Quienes dispongan de un seguro de vivienda, podrán leer no cubre por inundaciones, tampoco lo hace la póliza de inquilinos, y por este motivo hay que adquirirlo por separado sí o sí.

   La forma de ahorrar en este tipo de seguros es ver qué valor tiene la casa que se pretende habitar, ya que debería entenderse este seguro como parte de los gastos obligatorios para quienes arrienden un inmueble.

5. Seguro automotriz
   No hay que pensar que asegurar por el mínimo el vehículo es una decisión inteligente, pues un accidente supera la cobertura mínima legal obligatoria con creces.

   La mejor forma de ahorrar con este tipo de seguros es ver cuánto cuesta el seguro antes de comprar un automóvil, pues hay muchas ofertas que se asocian a tipos de vehículos determinados. Los autos que tengan un valor menor a $1,000 es conveniente quitarles el seguro de reposición, pero sí tener una cobertura de responsabilidad civil cercana a los $100,000 por persona, mientras que para daños personales o a terceros se tenga una cobertura de $300,000.

6. Seguro para inquilinos
   Los llamados seguros para inquilinos o “renters insurance” que se encargan de cubrir las pérdidas de arrendatarios frente a siniestros como incendios y otros, cubren ciertos gastos de mantenimiento y son bastante necesarios.

   Para ahorrar dinero con este tipo de seguros hay que ver qué empresas ofrecen descuentos según la cantidad de seguros que se obtengan por la misma compañía, pues hay quienes establecen rebajas cuando se compra más de un seguro.