10 bancos de Estados Unidos devolverán fondos al Estado
El departamento del Tesoro de Los Estados Unidos dio autorización, el pasado Martes 9 de Junio, para que 10 de los bancos más importantes del país puedan devolver la suma de 68.000 millones de dólares que les fueron otorgados por el Estado (en fondos públicos) con el fin de estabilizar el sistema financiero.
El “test de resistencia” realizado por el Tesoro a principios de mayo sobre los 19 mayores grupos bancarios, para certificar su capacidad de hacer frente a una nueva degradación de la coyuntura, había catalogado a 8 de ellos, como suficientemente capitalizados.
A estos ocho, se añaden Morgan Stanley tras conseguir 2.200 millones de dólares en el mercado (sin ayuda del Estado), habiendo sido considerado insuficientemente capitalizado en mencionada “prueba de resistencia” y Northern Trust que no fue incluido en las pruebas.
La decisión dictada por el Departamento del Tesoro permitirá que estos establecimientos puedan cancelar sus deudas y así librarse de las condiciones tales como la limitación en las remuneraciones de sus ejecutivos, que habían sido impuestas por el Estado en contrapartida a la ayuda brindada.
La lista de los 10
Bank of New York Mallon, American Express, Capital One, US Bancorp, State Street, BB&T, Goldman Sachs, JP Morgan Chase, Morgan Stanley y Northern Trust.
Todos estos habían recibido fondos del Estado tras un plan de recapitalización, creado durante la gestión de George W. Bush, que inyectó en más de 600 bancos una suma superior a los 200.000 millones de dólares.
De los fondos atribuidos por el Estado, 25.000 millones de dólares fueron otorgados a JP Morgan, mientras que los bancos de inversiones Goldman Sachs y Morgan Stanley recibieron 10.000 millones de dólares respectivamente.
Los grandes ausentes de la lista de entidades autorizadas son: el primer banco del país, Bank of America y Citigroup, que deberán esperar para restituir los 45.000 millones de dólares recibidos del Estado.
Repercusiones
Para el Tesoro estadounidense, estas devoluciones son "una señal alentadora de restablecimiento financiero que van a producir ganancias de varios miles de millones de dólares para el Estado”, así lo señaló el Secretario del Tesoro, Timothy Geithner en concordancia con el actual presidente Barak Obama, quien “se congratuló porque varios bancos decidieran realizar los reembolsos”, sosteniendo que: “no escaparan a la crisis sin pérdidas para los consumidores”, pero destaca la importancia de las ganancias obtenidas por el gobierno en la primera etapa de reembolsos de las empresas.