La mayéutica y el Coaching empresarial

La evolución no desde la enseñanza, sino desde el aprendizaje a través del conocimiento intrínseco del "yo". Esa es la clave del crecimiento y el desarrollo que derivan en la consecución de los objeti

coaching empresarial

El cambio de modelo productivo al que se enfrentan las sociedades en el momento actual no es casual.

La necesidad de establecer un nuevo orden social en el que las relaciones se basen en los valores tradicionales perdidos y diluidos por la anarquía propia de la especulación sin límite y la falta de productividad como elemento responsable de la atrofia de uno de los bienes más preciados del ser humano –su capacidad de ser racional, de evolucionar a través de su racionalidad y de crecer a través de la experiencia- tampoco lo es.

Y, es precisamente en este contexto en el que emergen con fuerza términos tan antiguos en su definición pero modernos en la palabra asignada como el Coaching.

Establezcamos una similitud entre la Mayéutica propia de Sócrates y el Coaching. La mayéutica establece su premisa básica en el aprendizaje, distinto a la enseñanza. Sócrates era un acérrimo defensor del aprendizaje, el descubrimiento de la verdad a través del crecimiento interno, no a través de la recepción de una enseñanza explícita.

Al igual que sucede en el Coaching, término que hace referencia a la forma en la que podemos desarrollarnos como individuos a través de nuestro interior, como lograr establecer una actitud positiva frente a cualquier escenario que sirva de punto de partida y lograr, a través de la motivación y el crecimiento, incrementar nuestra productividad vital.

La relación entre el Coaching y la mayéutica se establece en el desarrollo del individuo hasta lograr responderse a sí mismo ante cualquier escenario.

Sócrates solía defender la teoría de que sus pupilos no aprendían de sus conocimientos, sino que a través de las herramientas que él les facilitaba, ellos eran capaces de descubrir lo que había en su interior y, por lo tanto, ser capaces de generar pensamientos positivos, ideas innovadoras, creencias sostenidas y creatividad explícita.

Sin disciplinas pero con constancia

El término disciplina tiene siempre una connotación negativa que el coach tiende a evitar. El proceso no se establece en base a obligatoriedad, disciplina o imposición, sino que es a través de la constancia y el ejercicio de los músculos cerebrales que rigen la naturaleza de nuestros pensamientos, cómo se logra el aprendizaje y, por lo tanto la superación.

Conocimiento interno, el camino a recorrer

En base a esta creencia el coach al igual que la mayéutica, establece que únicamente conociéndonos mejor, seremos capaces de abrir nuestras opciones al progreso. Un progreso que nos hace primeramente, mejor persona y de forma indivisible, mejores profesionales. Es en base al diálogo interno como llegamos a descubrir aristas de nosotros mismos desconocidas y sin desarrollar.

Objetivos realistas, la ilusión necesaria para caminar hacia el éxito

Ese diálogo interno es el que permite establecer los objetivos perseguidos. Éstos son, sin ninguna duda, la ilusión que necesita el ser humano para mantenerse en movimiento y evolución constante.

Humildad, eje del aprendizaje

Otro de los aspectos fundamentales a desarrollar para lograr una evolución interna que se traduzca en la consecución de logros personales y profesionales de gran trascendencia, es la humildad. No existe aprendizaje sin humildad y, conviene recordar que la vida –per se- es un aprendizaje constante.

La humildad intelectual es una de las premisas básicas en la búsqueda del crecimiento

Relaciones bilaterales

Así, si hablamos de mayéutica y Coaching aplicado a los negocios, debemos establecer como punto de partida el hecho de una relación bilateral, en la que las partes implicadas estén en la misma línea de aportar lo mejor de cada uno. Para ello, es imprescindible ser capaz de cumplir con algunos requisitos.

  1. Si siente que no puede por usted mismo modificar su actitud frente a algunas situaciones, póngase en manos de un experto
  2. Recuerde siempre que el coach es una forma de mejorar y, por lo tanto no se trata de hacer explícitas las debilidades sin más, esto llevaría a una destrucción de la autoestima del individuo y el resultado sería el opuesto al perseguido
  3. Apertura y disposición, son claves en el proceso
  4. No se olvide de la humildad, la única forma de crecer es teniendo presente que siempre podemos aprender más
  5. El esfuerzo, en su acepción más positiva es clave para lograr los objetivos propuestos y conseguir que las cosas funcionen como uno quiera

Conclusiones

El Coaching está de moda hoy, es cierto, pero no se distingue mucho de las teorías de Sócrates, la organización social, económica y política de los romanos o los preceptos de la civilización griega. En todos los momentos históricos, han existido personas que quieren dar un paso más en la evolución.