Dolar al alza
Para las empresas norteamericanas tener un dólar muy fuerte puede traer aparejado complicaciones en las exportaciones, de hecho ya hay un retroceso real. Situación absolutamente inversa a los demás países que exportan hacia Estados Unidos.
Para las empresas norteamericanas tener un dólar muy fuerte puede traer aparejado complicaciones en las exportaciones, de hecho ya hay un retroceso real. Situación absolutamente inversa a los demás países que exportan hacia Estados Unidos.
El dólar americano ha tenido un repunte en comparación con el euro en los últimos cinco meses llegando casi a un once por ciento. Vaticinios de importantes bancos como Bank of America y Royal Bank of Scotland remarcan una factible depreciación del euro.
Para las empresas norteamericanas tener un dólar fuerte puede traer aparejado complicaciones en las exportaciones, de hecho ya hay un retroceso real. Situación absolutamente inversa a los demás países que exportan hacia Estados Unidos.
En Latinoamérica se ha visto con honda preocupación como desde hace tiempo se venía depreciando la moneda norteamericana, esto sumado a la dificultad de competir en algunos rubros con países poderosos como China o la Unión Europea, formaban un cóctel recesivo muy importante.
Hoy los exportadores latinoamericanos están viendo con muy buenos ojos el alza del dólar. Es que países del MERCOSUR, como Argentina, Brasil, Uruguay (a pesar de su pequeñez) dependen en gran medida de las exportaciones en dólares. Argentina es un gran exportador de soja y carne vacuna. Uruguay vende la gran mayoría de carne al exterior, es un país agropecuario netamente exportador. Y Brasil es otra potencia exportadora, siendo el país con mayor exportación de porcinos en el mundo (China es el mayor productor, pero es sólo para el consumo interno), además de exportar carne vacuna, arroz e insumos varios
Evidentemente el alza del dólar es un gran beneficio para los países exportadores, ya que venden en dólares y pagan sus insumos en la moneda nacional, por tanto, cuanto más suba el dólar, mayores ganancias obtendrán.
Claro, este panorama no es el mismo para Estados Unidos, que aún ve con preocupación al euro. El aumento del dólar frente al euro, aún en cantidades muy pequeñas, alimenta el temor de los mercados y esto repercute en las acciones de las empresas. Es un mercado especulativo y esos son los riesgos.
Los exportadores norteamericanos ya han empezado a quejarse ante el gobierno que están sintiendo los efectos de la problemática del alza del dólar y que de no mediar algunas intervenciones estatales esto podría tender a agravarse. Asimismo, estas afirmaciones muchas veces son para tomarlas con cautela, pues cuando se habla de grandes grupos empresariales, suelen suceder lobbys para generar alarma y crear fantasmas donde no los hay. Esto sin desmedro en que efectivamente sea un problema real para la economía de Estados Unidos.
Sin embargo, antes de diciembre los augurios de grandes recuperaciones positivas en la economía eran tal vez un poco desmedidas, y el alza del dólar ha complicado, aunque habría que medir con mucha objetividad la real situación de desventaja comercial.
En Latinoamérica el dólar, según los analistas, ha tenido una apreciación por varios factores. Uno es la intervención del propio estado a través de sus Bancos Centrales en la compra de divisas, empero también hay temores en la eurozona que llevaron a esta tendencia alcista del dólar.
La pasada semana el euro había sufrido una nueva caída con respecto a la moneda estadounidense. En Brasil, por ejemplo, el dólar tuvo un incremento de 2,1% llegando a los 1,798 reales.
No es un panorama fácil, Estados Unidos necesita de una Latinoamérica sólida económicamente, pero tampoco puede descuidar la fortaleza de su economía, que ya ha sufrido envites importantes; y el alza del dólar es visto con preocupación, aunque hasta el momento sin alarmismo.