¿Quién financia a la Organización Mundial de la Salud?
La Organización Mundial de la Salud está en la mira del presidente de Estados Unidos quien ha decidido dejar de financiar a la entidad mundial por, a su entender, su cuestionable labor en la propagación del coronavirus.
La Organización Mundial de la Salud está en la mira del presidente de Estados Unidos quien ha decidido dejar de financiar a la entidad mundial por, a su entender, su cuestionable labor en la propagación del coronavirus.
El presidente estadounidense, Donald Trump, ordenó el martes 14 de abril suspender las contribuciones de Estados Unidos al presupuesto de la Organización Mundial de la Salud justo cuando el ente es una referencia en la lucha en el mundo contra la pandemia del coronavirus. El mandatario manifestó que la medida se aplicaría mientras se realizara una revisión del papel de la OMS en las graves fallas en la gestión de la pandemia del COVID-19, así como en el presunto ocultamiento del alcance de los contagios.
Trump acusa al ente de seguir las directrices del gobierno de China, lugar donde se originó la pandemia. Al respecto sostuvo:
"Si la OMS hubiera hecho su trabajo de enviar expertos médicos a China para calibrar la situación de forma objetiva en el terreno y criticar la falta de transparencia de China, el brote se podría haber contenido en el foco con muy pocas muertes".
Cómo se financia la OMS
Fundada en 1948 como parte del sistema de la Organización de las Naciones Unidas, la OMS tiene como objetivos "promover la salud, mantener el mundo seguro y servir a los vulnerables". La institución, cuya sede está en Ginebra, Suiza, dispuso para el periodo 2018-2019 de un presupuesto de 5.600 millones de dólares, que se nutre principalmente de dos fuentes distintas.
En primer lugar, están las contribuciones obligatorias que hacen sus 194 estados miembros. Se trata de cuotas que son fijadas por la ONU de acuerdo con una fórmula compleja que toma en cuenta la riqueza y la población del país. Es dinero que sirve básicamente para pagar los salarios y los gastos administrativos. En 2018-2019, estas aportaciones representaron alrededor de 950 millones de dólares.
En segundo lugar, están las contribuciones voluntarias que permiten a donantes estatales y no estatales comprometer fondos para campañas sobre temas concretos como, por ejemplo, la vacunación contra la polio, el cuidado de la salud de las mujeres o la erradicación del tabaquismo. En el periodo 2018-2019, estos fondos fueron de unos 4.300 millones de dólares.
Origen del problema
Jack Chow, exembajador de Estados Unidos para la lucha global con el VIH y ex subdirector de la OMS, sostiene que en los últimos tiempos la OMS se ha vuelto cada vez más dependiente de esos recursos voluntarios, que ya forman la parte más abultada de su presupuesto.
En declaraciones a la BBC, Chow manifestó:
"Esto genera un problema porque entonces son los donantes quienes establecen la agenda que debe seguir la OMS, en lugar de que esta obedezca a su criterio profesional".
De acuerdo con la información financiera más reciente ofrecida por la OMS, Estados Unidos es el principal contribuyente al haber comprometido unos 893 millones de dólares para el periodo 2018-2019, de los cuales hasta el cuarto trimestre de 2019 ya habían sido desembolsados unos 553 millones de dólares; lo que equivale al 14,7 % de todos los recursos recibidos por la organización.
Por otro lado, China tenía comprometidos unos 86 millones de dólares, de los cuales había desembolsado más de 7 millones de dólares; lo que equivale a 0,21% de los fondos.
Después de Estados Unidos, el segundo mayor contribuyente a la OMS es la Fundación de Bill y Melinda Gates, que comprometió unos 530 millones de dólares, de los cuales había hecho efectivos unos 367 millones de dólares, equivalente a 9,76%. Los Gates se han mostrado críticos con la orden de Trump de suspender las contribuciones.
El tercer mayor contribuyente es GAVI, una asociación en la que participan organizaciones de los sectores público y privado que buscan incrementar el acceso que tienen a las vacunas los 73 países más pobres del mundo. Suman aportaciones por 316 millones de dólares, un 8,9% de los fondos recibidos por la OMS.
Reino Unido es el cuarto mayor donante y el segundo Estado que hace más aportaciones con desembolsos hasta el cuarto trimestre de 2019 por unos 294 millones de dólares, equivalentes al 7,79% del presupuesto.
En América Latina, los países que tienen las mayores cuotas son Brasil ($35,5 millones), México ($13,7 millones) y Argentina ($8,5 millones).