La toma de decisiones del emprendedor a cargo de una Pyme

El emprendimiento adquiere una importancia superlativa en un momento como el actual. Ciertamente y, si observamos las proyecciones en términos de empleo, la creación de una actividad laboral independiente se hace imprescindible. Sin embargo, son muchos los conceptos a tener en cuenta si quiere transformar sus conocimientos en aptitudes para el emprendimiento.

Una de las claves principales del emprendimiento en el sector de las PYMES y micropymes es la asunción de desafíos, la correcta toma de decisiones a las que todo emprendedor se enfrenta día a día.

Como en todas las áreas, toda acción tiene consecuencias implícitas y efectos tangibles, ya sea directamente o analizados como efectos colaterales, que irremediablemente redundan en las finanzas de su empresa, en la relación con sus clientes y en la evolución de su empresa.

Tomar decisiones en el área del emprendimiento se transforma en una actividad dinámica y constante, el análisis exhaustivo de la decisión a adoptar en ocasiones, no es viable y… muchas más veces de las previstas y las establecidas en los manuales de emprendimiento, hay que improvisar. El quid de la cuestión está entonces en elaborar un plan de improvisación basado en premisas básicas a fin de garantizar el éxito en un mayor número de ocasiones ya que de otra forma, la producción, rentabilidad y futuro de la empresa, podrían tambalearse.

Decisiones correctas

¿Cuál es patrón a seguir para garantizar el éxito en nuestras decisiones?, no existen panaceas en el ámbito de la empresa, sin embargo, existen elementos que aportan la solidez necesaria para que, en aquellos casos en los que las decisiones no sean acertadas, la solución se lleve a cabo con la mayor celeridad y los menores efectos colaterales.

¿Cuál es el objetivo?

Tanto si es una mono empresa, como si se trata de un negocio en el que existen colaboradores, uno de los primeros conceptos a evaluar es el objetivo perseguido. Para ello, la elaboración de un plan de empresa previo al inicio de la actividad es fundamental.

Misión y visión

Una de las primeras actividades que debe realizar cualquier emprendedor es tener un documento elaborado y visible en el que se establezcan las claves del negocio:

1. Objetivos y metas. Aquellas que son accesibles y realistas
2. Misión del negocio. A quien va dirigido
3. Visión del negocio. Análisis del mercado, competencia, valor añadido, costes y horizonte temporal para la consecución del objetivo
4. Plan de acción. Es irrelevante que, al principio, éste no esté debidamente formado ni adaptado a la realidad, ya que, un plan de acción es una de las variables más dinámicas de toda empresa y se irá perfeccionando y puliendo a medida que el negocio avanza
5. Análisis de decisiones previas. Este aspecto es muy importante ya que, únicamente pudiendo evaluar nuevamente aquellas decisiones adoptadas que arrojaron mejores resultados, se obtendrán muchas respuestas en ellas implícitas y, de seguro, muchos puntos de concordancia entre la decisión y el resultado

Diferencias entre emprendedor y empresario

Es muy importante tener presente que un negocio propio, una mono PYME o micro PYME no es lo mismo que transformarse en empresario.

La flexibilidad en el emprendimiento es clave, el dinamismo y la capacidad de modificar los “procedimientos” elaborados, son claves en la consecución de los objetivos perseguidos por todo emprendedor

Mientras en la empresa tradicional las decisiones se transforman en burocráticas e involucran a los estamentos y los consejos de dirección y gerencia, el emprendedor cuenta con la capacidad del aquí y ahora, inherente al emprendimiento y, para ello hay que ser flexible.

La formación, de nuevo clave en el emprendimiento

Si, no nos cansamos de referirnos a este ítem en concreto siempre que abordamos los aspectos inherentes al emprendedor. Y es que, la formación constante es clave para estar al día, para distinguir y diferenciar las oportunidades que se presentan, para saber qué está cambiando, hacia donde se dirige el negocio, qué están haciendo los demás, qué experiencias han resultado óptimas y cuáles han fracasado y por qué.

Internet es el escenario idóneo para la formación del emprendedor, las pautas, claves y tendencias de todos los mercados y sectores, están ahí, en tiempo real al alcance del emprendedor.

Constancia y brainstorming

Para terminar, la constancia y el brainstorming permanente, ya sea una mono empresa, una microempresa o un emprendedor que presta servicios a clientes, son claves en la toma de decisiones. Escuchar a los colaboradores, a los clientes y ser constantes en la actividad emprendida, facilitará la toma de decisiones.

No podemos olvidar que el emprendimiento se basa en una máxima única, el valor agregado humano, único y proveniente de los seres humanos que intervienen en el proyecto.