José Simeón Tejeda y la libre industria
Su visión política de la sociedad lo convierte en uno de los pioneros del pensamiento liberal en el Perú.
Su visión política de la sociedad lo convierte en uno de los pioneros del pensamiento liberal en el Perú.
Revisando los primeros pasos de las ideas liberales en la naciente república peruana nos topamos con el nombre de José Simeón Tejeda, político y abogado peruano cuya carrera destacó por la defensa férrea del libre ejercicio de la industria.
José Simeón Tejeda Mares nació en Andaray, Arequipa en 1826. Sus padres fueron José Santos Tejeda y María Juliana Mares. Cursó sus estudios escolares en el Colegio Nacional de la Independencia Americana de Arequipa, pasando luego a la Universidad Nacional de San Agustín de dicha ciudad, donde se recibió de abogado el 8 de marzo de 1851. Obtuvo también un doctorado en Economía Política, ciencia que entonces era una novedad en el Perú.
El 6 de agosto de 1852 fue admitido como socio en la Academia Lauretana de Ciencias y Artes, ocasión que aprovechó para leer un discurso sobre la emancipación de la industria.
Tejeda también dedicó tiempo al periodismo, colaborando en el diario El Republicano.
Ingreso a la política
Su carrera política la inició en 1854, cuando se sumó a la revolución liberal que estalló en Arequipa contra el gobierno de José Rufino Echenique y que fue encabezada por el general Ramón Castilla. Tras el triunfo de esta revolución, ingresó a Lima junto a las fuerzas victoriosas, en enero de 1855.
Como político se distinguió por ser moderado, nunca radical. Fue miembro de la Convención de 1855 por la provincia de Chumbivilcas entre 1855 y 1857 que, durante el segundo gobierno de Ramón Castilla, elaboró la Constitución de 1856, la sexta que rigió en el país. Tejeda ejerció la secretaría de este congreso, así como su vicepresidencia. Dicha Convención fue disuelta en 1857, luego de dar la Constitución Liberal de 1856.
Fue uno de los fundadores del diario La Gaceta Judicial, cuyo primer número apareció el 15 de mayo de 1861.
Integró la comisión encargada de redactar los proyectos de Código Penal y de Procedimientos Penales, promulgados en 1863.
En 1864 fue elegido decano del Colegio de Abogados de Lima.
Labor ministerial
Durante el gobierno del general Juan Antonio Pezet fue nombrado ministro de Justicia e Instrucción, conformando el gabinete presidido por Manuel Costas, del 11 de agosto al 16 de octubre de 1864. Eran los días de la crisis internacional desatada por la agresión de la Escuadra Española del Pacífico.
Al organizarse el gobierno dictatorial del coronel Mariano Ignacio Prado, fue nuevamente convocado para hacerse cargo del portafolio de Justicia e Instrucción (28 de noviembre de 1865). Este gabinete ha sido llamado por Basadre como el «de los talentos», pues todos sus integrantes eran destacados intelectuales.
Entre ellos estaban José María Quimper (Gobierno), Manuel Pardo y Lavalle (Hacienda) y José Gálvez Egúsquiza (Guerra y Marina).
Dentro del ministerio, José Simeón Tejeda planteó la reforma de la enseñanza universitaria. Se mantuvo en el cargo hasta el 15 de febrero de 1867, cuando finalizó la dictadura, pero manteniéndose Prado como presidente provisorio.
El Partido Civil
En 1871 participó en la asamblea ciudadana en donde se fundó la Sociedad Independencia Electoral, que se convirtió en el Partido Civil, el mismo que lanzó la candidatura presidencial de Manuel Pardo y Lavalle, que resultaría triunfante.
En 1872 fue nuevamente elegido diputado por la provincia de Condesuyos. En esa circunstancia tuvo que enfrentar la grave crisis política provocada por la rebelión de los coroneles Gutiérrez, la cual trajo consigo el atentado contra el Congreso y el asesinato del presidente José Balta.
Elevado a la presidencia de la cámara de diputados, colocó la banda presidencial a Manuel Pardo, en la solemne ceremonia de toma de mando realizada en el recinto parlamentario, el 2 de agosto de 1872.
En 1873 llegó a ser alcalde de Lima por elección popular, cargo desde donde se empeñó en difundir y cimentar la instrucción primaria.
En su calidad de importante dirigente del Partido Civil, se le veía como el sucesor de Manuel Pardo en la presidencia. Pero falleció repentinamente el 23 de agosto de 1873, con apenas 47 años de edad.
Pensador Liberal
En 1852, José Simeón Tejeda publicó el libro “Libertad de la industria” de donde pueden extraerse algunas citas que confirman la tendencia liberal de su filosofía:
“El libre ejercicio de la industria es el fundamento de la paz”.
El autor incluso critica a los regímenes colegiados y gremiales de profesionales, defendiendo a los intelectuales creadores:
“Sujetos ellos (los intelectuales) a la ley de concurrencia libre, ley general que proclamo, no reconocen la mano profana de la política que viene a fijar su número limitando su ejercicio”.
Tejeda fue un sistemático opositor a las restricciones comerciales y proclamó claramente que cuando no se da la libre competencia se perjudica al consumidor. Esta posición es distinta a la mayoría de políticos y pensadores de la época, por lo que se constituye en un antecedente importante.
En su obra, José Simeón Tejeda defiende la separación entre el poder industrial y el poder político, pues consideraba a este incompetente para dirigir a aquel.
Según su punto de vista, era perjudicial la tendencia que buscaba reglamentar la industria.