Reglas bancarias que eviten otra crisis, la iniciativa comienza en Suiza
La cita que se llevará a cabo en Suiza con las potencias más importantes del mundo financiero, promete cambiar la política económica mundial.
La cita que se llevará a cabo en Suiza con las potencias más importantes del mundo financiero, promete cambiar la política económica mundial.
La crisis económica que ha comenzado en el 2008, hasta el momento tiene las economías en una paupérrima recuperación, causó estragos en Europa, requebrajo a Estados Unidos e inicio una debacle que arrastro una vez más al mundo entero al borde de una abismo, pero ¿Se han tomado todas las medidas necesarias para evitar otra crisis similar? Quienes no se han convencido de ello, creen que el próximo encuentro en Suiza entre Estados Unidos, Francia, Alemania y Japón será decisivo para marcar la pauta de la nueva normativa bancaria que evitará nuevas debacles.
Decisiones importantes dependen de la reunión de estas potencias económicas, pues según la normativa aplicada al mundo entero y los cambios que se hagan en las fórmulas de gestión del riesgo, tomarán decisiones las grandes entidades bancarias. La idea de Suiza es hacer una antesala que se espera, resulte aprobada por la reunión con el Grupo de los 20 países más industrializados de todo el mundo. El encuentro se llevará a cabo en Basilea, Suiza, a mediados del mes de Septiembre del presente año para preparar el informe a presentar en Noviembre, para la cumbre que se celebrará en Corea del Sur.
¿Qué es lo que se aprendió de la crisis? Sin duda una de las lecciones más interesantes es la falta de capital de las entidades bancarias para soportar el gran peso de las transacciones económicas que realizan, pues cuando estas salen mal simplemente no hay un plan de contingencia suficiente como para sustentar la economía. Una modificación respecto del capital que se deberán reservar los bancos para absorber sus pérdidas es parte de la agenda a regular. Otro punto interesante es calcular qué capital se necesita para garantizar las posibles pérdidas, pues todas estas entidades financieras operan de manera diferente, aún cuando operen globalmente.
Uno de los problemas comunes que dificulta la creación de una normativa más restrictiva es la dependencia de estándares locales, según el país en el que esté establecida la institución. De esta forma, hay una abierta ventaja para los bancos que están en lugares donde el estándar de capital es más bajo y se puede prestar más dinero.
Las expectativas que se tienen del Comité de Basilea sobre la supervisión bancaria no son que todos los bancos del mundo adopten una normativa específica, pero sí que los países hagan todo lo posible para adherirse a un estándar que evite beneficios injustificados a un grupo de bancos sobre otros. La opinión por el momento es disímil, países como Alemania, Francia y Japón no le gusta la exposición que hace Estados Unidos, mientras que Australia y Canadá – economías que no han resultado dañadas por la crisis como otras – no quieren arriesgar la estabilidad de sus instituciones con métodos y reglas que no han sido probadas aún.
Antecedentes previos a la cita en Suiza en Septiembre
De la reunión que se llevó a cabo en Suiza el 26 de Julio, hay elementos que se modificaron en pos de una propuesta renovada, a saber, se plantearon reglas más flexibles para el concepto de “capital”, haciendo posible que en él se encuentren activos como las inversiones inmobiliarias o también las inversiones hechas por aseguradoras. Según el consenso llegado, todas estas variables juntas no pueden exceder el 15% del total del capital del banco.
En relación a cuánto es el capital que se le deberá exigir a los bancos, aún no está claro lo que sucederá, sin embargo algunas de las propuestas consistían en se pida el 5%, es decir, 5 dólares por cada 100 dólares en activos o préstamos e inversiones.