4 cosas que las compañías de cable no nos dicen

Las compañías proveedoras de telecomunicaciones tienen muchos problemas, funcionan como monopolios y no dan soluciones.

Comcast
Comcast

Hay tantas cosas que podríamos decir de las compañías de cable que seguro nos quedaremos cortos, aunque uno de los aspectos que resalta en el último tiempo es que los paquetes que ofrecen no convencen, encontrar un buen servicio es realmente complicado y que los precios están subiendo muy rápido. Considerando todo esto nos preguntamos ¿Son razones suficientes como para cortar con el servicio?

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Los clientes están aburridos

Entre las compañías más conocidas de cable en Estados Unidos destacan dos, Comcast y Time Warner Cable, aunque al mismo tiempo ambas han sido clasificadas como dos de las más odiadas en todo el país este 2012 según varias encuestas (acreditado por American Customer Satisfaction Index). Lo interesante de todo esto es que, muchas de las razones manifestadas en Estados Unidos se repiten en muchas partes del mundo, de ahí nuestro interés en hacer el presente artículo.

Parte de las reclamaciones hechas se basan en cargos adicionales eternos en las facturas, falta de cumplimiento de las fechas de instalación, aunque para cobrar siempre están pendientes. Luego de ocurrida la súper tormenta Sandy, en Nueva York y New Jersey los clientes demandaron a Cablevisión por 250 millones de dólares al no haber recibido el servicio como corresponde de televisión, teléfono e Internet. Time Warner Cable por su parte recibió otra demanda en noviembre por comenzar a cobrar por módems que fueron entregados a los clientes, tarifa que pareciera ser fue prohibida.

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El buen servicio existe, sólo que no en nuestra área

Hay que reconocer que no todos los proveedores de cable, telefonía e Internet son reclamados por los clientes, pues hay compañías que consiguen obtener muy buenas calificaciones por parte de los clientes, aunque están en áreas muy específicas según el estudio hecho por Consumer Reports. Un ejemplo de lo anterior lo encontramos en la compañía WideOpenWest, la que trabaja sólo en el medio oeste de EEUU; esta empresa obtuvo la máxima calificación por parte de los clientes en tres servicios: telefonía, televisión e Internet.

Otro de los proveedores premiados ha sido Verizon FiOs, el que está disponible en 12 estados y Washington DC. Debemos reconocer que una de las características que hace de su servicio uno muy bueno es el poder llegar con fibra óptica directamente a la casa de los clientes.

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No somos un monopolio, pero quizás somos tu única opción

Después de la promulgación del Acta de Telecomunicaciones en 1996, que tenía por objeto aumentar el nivel de competencia en esta parte de la industria, muchos pensaron que las cosas mejorarían en cuanto al nivel de los servicios, los precios y ofertas, pero después de 15 años la realidad es una muy distinta. La Fereal Communications Commission mostró que el 61,5% de los clientes tiene pocas opciones para escoger a su proveedor de cable, notando además que ha habido una obstaculización importante para que surgieran nuevos competidores por parte de los más antiguos.

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El aumento del precio es parte del juego

Quienes se mantienen fieles a los servicios de cable notaron, hace mucho, que el aumento del precio es parte del costo que tiene no variar y tomar nuevas ofertas de parte de compañías rivales, por ello decimos sin miedo que, lamentablemente, son las compañías proveedoras de estos servicios quienes tienen el sartén por el mango.

Una muestra de lo que comentamos es que, el servicio más básico de cable subió un 5.4% de precio el 2011 respecto del 2010 según la FCC, algo que contrasta con el alza que se observó en el resto de los bienes de consumo que fue de 1.6% según el Consumer Price Index. De 1995 al 2011 el precio se duplicó, algo que sorprende a muchos al no poder ser regulado por la autoridad que sólo tiene ingerencia en los servicios básicos, más no en los Premium como son la inclusión de canales especiales o DVRs.

Lo más interesante es que los precios que tenemos hoy son muy similares a los que veíamos en la década de los 80, donde el cable era una verdadera novedad en Estados Unidos, y donde además dicho sea de paso, el monopolio de algunos era casi inevitable.