Saber hacer las preguntas, lo que un buen líder debe hacer
Ser un buen líder no es sinónimo de saber hacer todo, sino de conocer cómo encontrar soluciones a todos los problemas.
Ser un buen líder no es sinónimo de saber hacer todo, sino de conocer cómo encontrar soluciones a todos los problemas.
Saber hacer una pregunta no es tarea fácil, por ello los jefes o líderes –términos que no necesariamente son sinónimos- tienen la difícil misión de saber lidiar con sus empleados, quienes a su vez constantemente tienen inquietudes y se encuentran por alguna extraña razón en un plano distinto al de sus superiores, aunque no inesperado, pues al final todo se resume en el enfoque mental de cada cual.
Mientras que los empleados se preocupan en hacer preguntas, los buenos líderes no se molestan en contestarlas, sino en replantearlas para conseguir que los propios emisores encuentren por si mismos la solución.
Un buen líder no es una enciclopedia viviente, es un guía.
El arte de hacer que los empleados consigan resolver sus inquietudes por sí mismos y saber hacer preguntas o plantear problemáticas de una forma adecuada, es una misión compleja, por ello es mejor concentrarse en el invariable hecho que vale para jefes y empleados, cual es “uno sabe sólo lo que sabe, y no sabe lo que no sabe”, que aunque parece una frase sin sentido, tiene uno bastante profundo.
Siempre se aspira a realizar tareas que no se saben para “aparentar ser mejor”; se cree erróneamente que aquel que sabe más es mejor, cuando en el fondo ser mejor quiere decir “poder hacer mejor las cosas de lo que las hacen los demás”, pero no implica hacer siempre todo uno mismo.
Medir la calidad de un líder
Un buen líder sabe cómo sacar lo mejor de sus trabajadores, aprovechando su potencial y conocimiento. La calidad de un líder no es puesta en tela de juicio por las respuestas que da a las preguntas realizadas, sino más bien por las preguntas que es capaz de hacer y la forma en que consigue encontrar las respuestas para éstas y otras interrogantes. El motivo por el cual los lideres deben hacer las preguntas es simple, deben obtener la mayor cantidad de información posible, aprender más y ver otras perspectivas, sólo de esa forma se tomará la mejor decisión.
Hacer una buena pregunta obliga a obtener una buena respuesta y, acto seguido, tomar una buena decisión. Un ejemplo de la pregunta que haría un buen líder es ¿Qué piensas de la opción A?; un líder mediocre preguntaría algo como ¿Cuál crees que es la mejor opción?
Los grandes líderes hacen preguntas
- Todos los grandes líderes saben que no tienen conocimiento sobre todo y nunca tratan de probar lo contrario, nunca piensan si se trata de la idea del resto o de cualquier otro la que se implementará finalmente, mientras sea la mejor de las ideas lo que importa es que se haga
- Constantemente están atentos alrededor de personas que son inteligentes y conocen mejor que ellos sobre temas específicos
- Los grandes líderes no conocen todas las respuestas, pero sí saben cómo hacer que otros se inspiren para que lo ayuden a encontrar la mejor alternativa
Hacer una buena pregunta es una herramienta fundamental, y debería ser utilizada constantemente, más allá de los momentos en que se deba tomar una decisión lo líderes tienen que interactuar con el resto del equipo para definir metas y encontrar soluciones como un equipo.