Productos agrícolas subirían hasta 30% en 2023

La crisis alimentaria que atraviesa el Perú parece estar lejos de solucionarse y, por el contrario, amenaza con empeorar en 2023. Un informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) revela que hasta 2021 el país registraba alrededor de 6.2 millones de personas en inseguridad alimentaria grave.

La Sociedad Nacional de Industrias (SNI) señaló este año que uno de cada cinco personas padece de este problema, es decir que se quedó sin alimentos o estuvo todo un día sin comer varias veces durante un año.

Esta situación se complica aún más si se tiene en cuenta la escasez y alto costo de los fertilizantes, factores que contribuyen al alza de precios de los alimentos, perjudicando, de esta manera, a la población más vulnerable del país.

Hay productos de la canasta básica familiar que, en lo que va del año, ya han registrado incrementos que superan el 200%, y para 2023 el panorama no se ve mejor. El presidente de la Convención Nacional del Agro Peruano (Conveagro), Clímaco Cárdenas, estimó que en promedio la papa, el arroz, el maíz y la cebolla podrían encarecerse en 30% en 2023.

La principal razón del alza de precios responde principalmente a un mayor costo de producción y una disminución de la siembra.

Para Clímaco Cárdenas, parte del problema radica en la pésima gestión del Gobierno en cuanto a la compra de fertilizantes, incluyendo el cuarto concurso que también fue observado por la Contraloría.

Papa caliente

El Ejecutivo continúa asegurando que el fertilizante para los agricultores llegará en diciembre (cuando debió haber llegado en agosto), pero su palabra ha perdido crédito entre los agricultores.

Uno de los que perdió esa esperanza es el presidente de la Corporación Rural de la Papa, Freddy García, quien aseguró que, pese a los retrasos, esperaban contar con el producto en octubre.

Ahora están seguros de que no será así y vislumbra no solo una escasez peligrosa del producto, sino también una subida de los precios.

Según García, los agricultores de papa, antes de la pandemia, pagaban entre S/8,000 y S/10,000 por la producción por hectárea, ahora el precio está en S/20,000, prácticamente el doble.

Ante esta situación, el representante de los productores de papa plantea que el Ejecutivo brinde soluciones, incluyendo la provisión de guano de isla. No le tiene demasiada fe al Fertiabono porque considera que el asunto se ha “politizado” y no está llegando a quienes verdaderamente lo necesitan.